El pasado miércoles 6 de septiembre, el salsero colombiano Yuri Buenaventura y su orquesta, hicieron vibrar el escenario y pusieron a bailar a los miles de espectadores que asistieron a uno de los conciertos gratuitos ofrecidos por el World Music Festival en Vernier, Ginebra.
Originario de la isla Buenaventura de Colombia, Yuri Bedoya, ha adoptado el nombre de su tierra natal como artista. Su padre, don Manuel Bedoya, profesor de música y de teatro le transmitió su pasión por la cultura.
Viaja a Francia para ingresar a la facultad de Ciencias Económicas en Nanterre y siendo estudiante, inicia su carrera musical tocando en los metros de París para ganarse la vida. De ahí en adelante empieza a participar en la fiebre latina que se apodera de París a inicios de los años noventa y canta con el grupo Caimán y como corista en Mambomanía. Ha participado en la Orquesta Chaworo y cantado junto a Azuquita, Pappo Lucca, Roberto Roena, Orishas, el Gran Combo, Jerry Rivera, Faudel y Cheo Feliciano de la Fania All Star. En un ambiente donde la competencia es feroz, este cantante y músico colombiano se ha impuesto con una personalidad espontánea, con su buen ritmo y su voz ardiente.
Cómo si fuera poco, Yuri Buenaventura es conocido por ser un artista comprometido y ha sido apodado por la prensa cómo el Don Quijote de la salsa. Dice que quiere hacer música que haga bailar pero a la vez pensar. Entre otras cosas, sus letras quieren hacer conocer la historia de su gente y hacer conocer las palabras de poetas como Pablo Neruda. También ha retomado y traducido canciones de otros artistas como « Ne me quitte pas » de Jacques Brel, “Your Song” de Elton John, además de canciones de Michel Legrand y Mano Negra.