Ray Barreto - Que viva la Música!

Todavía están frescos y grabados en mi cerebro - como si hubiese sido ayer, varios momentos que me recuerdan a este gran percusionista y pianista.

El primero corresponde a las imágenes de la cinta Our Latin Thing en el proverbial Cheetah de NY - Calle 52 con Av 8va de Manhattan en donde se rodó durante la noche del jueves 26 de agosto de 1971 bajo la batuta del director León Gast el film. ¡Excitantes... excitantes las escenas!.
El segundo evento fue el saludo cordial con El Gigante de las Manos Grandes en uno de los pasillos del Hotel del Prado de Barranquilla- Colombia en marzo de 1996 horas previas al concierto de las All Stars de Fania en el Estadio Metropolitano Roberto Meléndez.

El tercer episodio recala en la proyección de la película que se logró filmar durante el segundo gran concierto en el Yankee Stadium en 1973. Inconcluso por cierto porque el público invadió el escenario y la organización se vio forzada a suspender el rodaje y realizar lo restante en estudio. En esa oportunidad el invitado fue el conguero habanero Mongo Santamaría y en una especie de duelo amistoso, en la interpretación del tema Congo Bongó (Larry Harlow - Heny Álvarez) - arreglos del bajista Bobby Valentín, ambos percutieron al unísono sus parches en vibrantes solos. Los repiques fueron matizados por el saxo del africano Manu Dibango.
Al final Barretto se levantó y terminó azotando frenéticamente una conga contra el piso. Gesto que fue interpretado por los críticos como un acto de rendición frente al Maestro cubano.
Con el paso del tiempo el hecho fue evidente y razonable ya que Ray siempre manifestó su respeto por sus antecesores encabezados por el habanero Luciano Chano Pozo a quien escuchaba de niño en un viejo radio de su madre.

El último acto sucedió en la zona VIP de Prensa durante la velada que disfruté cerca a la tarima en compañía de mi amigo de aventuras musicales Isidoro Corkidi Yaffe. A corta distancia escuchábamos al elegante Pacheco conducir a la tribu luciendo una chaqueta apache. El dominicano con sus arrestos muy arriba vociferaba: ¡Barretto...Barretto! para que Ray templara sus manos y le sacara chispas a los cueros. Se imaginarán que la histeria fue total. El Manos Duras castigó a su antojo a sus congas, a tal punto que salieron al frente: El coreógrafo, bailarín y ani mador Aníbal Vásquez (QEPD) en compañía de su sobrino Roberto Roena (Apollo Sound) y la balarina Amparo para deleitar a los asistentes con su cadencioso baile.
¡Claro! años atrás, en mi Barrio Boston de Barranquilla, frente a un lote (solar) en el que después se edificó el Centro Comercial La Piragua- Cra 43 (Veinte de Julio) con Calle 57 funcionó el Bar - Taberna El Watusi (Recordando a Barretto). Diagonal al mítico tertuliadero La Cueva. Fueron los tiempos de la charanga La Moderna.
¡Sacude Cotofio!.. Te saluda Barretto con la tumbadora y el güiro.

Genealogía boricua
Raymond Barretto nació el lunes 29 de abril de 1929, en el Barrio Brooklyn- NY y parte de su crianza ocurrió en los ghettos latinos del Harlem Oriental y el Bronx de la Capital del Mundo.
Sus abuelos fueron emigrantes de Islas Canarias- España plantados en PR. De ellos se nutre su ascendecia (raíces) puertorriqueña, de allí que sus progenitores y parte de su familia son oriundos de Aguadilla- PR. Él poco los mencionaba porque siempre se limitó a que sus tertulias recorrieran sólo la arista musical.
Su actual esposa es Annette Rivera y su hijo Chris es también músico. Las agencias de noticias desde PR dan cuenta que el próximo sábado 29 de abril de 2006, el Alcalde de Aguadilla- Méndez Martínez celebrará póstumamente los 77 años del conguero. Es muy factible la asistencia de la viuda, su vástago, Orlando, Ochi y Sammy Barretto familiares afincados en la población boricua. También se gestiona la actuación del sonero Adalberto Santigo que militó en su banda y que probablemente sea acompañado por la Orquesta Abran Paso.

Comienzos Musicales
Ray fue un intenso luchador, difusor y respetuoso de las raíces afrocubanas en la música. Su ciclo de aprendizaje fue inverso, al principio pisó los terrenos jazzísticos y después atracó en el Movimiento Salsero a partir de 1967- constituyéndose en uno de sus artífices.
Su estilo peculiar para percutir los membráfonos cilíndricos (congas) lo elevó a figura de la noche a la mañana. Aunque las congas por aquella época no tenían licencia a todo dar (carta abierta) para el Jazz clásico. Eventualmente las disqueras las empleaban para imprimirle color al género. Ray fue considerado uno de los precursores en la utilización de las congas en Jazz.

La estrechez económica de su familia la vivió desde muy niño al igual que la ame nazante discriminación racial que se experimentaba en el asfalto de NY. La música fue su válvula de escape y la vía para reivindicarse socialmente por medio de su reconocimiento artístico.
Su madre tenía un pequeño radio que cumplió funciones multipropósitos; ella escuchaba sus radio-novelas y cuando salía por las tardes a estudiar inglés, el pequeño se quedaba a cargo de la programación y disfrutaba escuchando a las figuras del Jazz de la época: Benny Goodman, Duke Ellington, Charlie Parker, Dizzy Gillespie, Count Basie, Miles Davis, Art Blakey, Lionel Hampton, Herbie Hancock, Wayne Shorter, Woody Herman, Ornet Coleman, Donald Byrd, Roy Haynes, Max Roach y también a cubanos y boricuas: Machito, Bauzá, Arsenio Rodríguez, José Curbelo, Miguelito Valdés, Tito Puente, Pedro Flóres, José Luis Moneró, Bobby Capó, Daniel Santos entre tantos.
Cada vez que se le indagó respecto a su esencia musical, Barretto manifestó que si bien era cierto que sus raíces eran latinas, su otra familia era el Jazz porque nació y creció en USA. Su talentosa obra se hibridó con el Jazz norteamericano y el basamento afrocubano.

Varias veces comentó que había iniciado su carrera musical a mediados de los 40s, e incluso mucho antes porque la calamitosa situación económica de su familia lo empujó con escasos 17 años a alistarse en la filas del Army- USA en 1946 y terminar en una barraca en Stuttgart- Alemania en tiempos de la II Guerra Mundial. Al campamento llegó no con las congas sobre el cuello como el amuleto que últimamente lo acompañó; pero si inspirado por el sabor de Manteca de Chano. Aunque era sólo un novato en la música que se atrevió a imitar a Chano golpeando la caja de resonancia de un viejo banjo (instrumento africano) en un bar de Münich. La respuesta a su osadía fue un espaldaraso a su talento.
Luciendo el uniforme, incursionó en varias Jam en tierras teutonas- Münich en el Club G1- Orlando sacando al ruedo sus progresos.
Al cerrar su ciclo en el servicio militar en 1949 regresó al Harlem- NY. Lo primero que hizo fue invertir en un par de congas para guapear en las descargas callejeras y entrar a gozar las Jam en los clubes que abundaban entre la 110 y la 155.

Es importante reseñar la inolvidable noche a inicios de los años 50s, cuando el pelao (joven) percusionista desparpajadamente se subió al escenario a sonar sus congas entre el grupo del legendario Charlie Parker- El Genio del Be-Bop anunciado en la marquesina del Apollo Bar (ubicado junto al Teatro Apollo- NY).
Parker tuvo un contratiempo y mientras un grupo de músicos descargó. Entre ellos se contaba a Barretto. En medio de la Session llegó Charlie y alcanzó a apreciar el vente tu (recogido e músicos). Y después de ver actuar a Ray le pidió que se quedara el resto de la noche a acompañarlo en la velada. La química de sus cueros le imprimieron al to que cierto sabor afro que más tarde se conoció como Cu-Bop.

Ese tamizado lo llevó con los años a estar inmerso en la Pachanga y después en el Boogaloo. Nada extraño para él porque sostenía que la Guajira y el Blues iban de la mano. Concepto que sostenía con una metáfora que asociaba la zafra de Cuba y PR con la recogida de la cosecha de algodón en el Sur de USA.
Aunque los anales registran que su primer trabajo formal fue con la Latin Jazz de Eddie Bonnemere.
A inicios de los 50s, un ejecutivo de la disquera Prestige, después de escucharlo en una Jam lo contactó para que grabara con el pianista y arreglista Red Garland que había hecho parte de la banda de Miles Davis. Eso sucedió en los estudios de Rudy Van Gelder y su primera grabación fue Manteca. Versión que ya le había escuchado a la conga de Pozo con el pito (trompeta) de Gillespie.

Después trabajó 3 años y medio en el puesto de conguero con el director, pianista y arreglista habanero José Curbelo. Al dejar al cubano siguió por la línea del Jazz y recibió llamados de Blue Note y algunos sellos discográficos.
En 1957, apareció su hito formal en sus más de 60 años de trayectoria, lo sembró cuando reemplazó en la Big Band del percusionista Tito Puente al conguero cubano Mongo Santamaría que se radicó en San Francisco- California. A él Ray lo apreció como un Maestro desde que lo vio sacarle sonidos a sus tambores.
Con Puente en los estudios RCA Víctor realizó la primera grabación de la session para el LP- Dance Manía. Se mantuvo activo con Tito 4 años.

A partir de esa gesta se fue dando a conocer y lo reafirmaba con su presencia en el las Jam que se armaban en los clubes de NY, con la participación de cultores del género: Max Roach, Art Blakey, Charlie Parker entre otros.
Vivencias que le abrieron espacios para grabar con: Lou Donalsond, Red Garland, Kenny Burell, Gene Ammons, Wes Montgomery, Sonny Stitt, Eddie Lockjaw Davis, Cannonball Adderley, Freddie Hubbard, Cal Tjader, Dizzy Gillespie, etc...

De La Duboney a La Moderna
Entre 1958 -1959 participó del proyecto del dominicano Pacheco y el teclista de Harlem -NY Charlie Palmieri Maldonado: La Charanga La Duboney.
En 1961 ó 1962 el ejecutivo Orrin Keepnews de Riverside Records que seguía los pasos a Barretto, le pidió que armara una agrupación para grabar un álbum. La respuesta de Ray no se hizo esperar: Nació su charanga La Moderna circulando en el mercado el LP- Pachanga With Barretto que impactó el ambiente con su ritmo pegajoso y cadencioso- acariciando linderos del Jazz y los ritmos latinos. Pero sin olvidar las raíces africanas. Mezclando el formato de Conjunto con el de una Típica.
Es posible que fuera el primer grupo de NY que amalgamó los violines con los vientos de trompeta, trombón y flauta.

Sobre este formato, mi amigo Eduardo Lalo Vizcarra, desde Panamá, vía teléfonica el pasado miércoles 22 de marzo de 2006, me comentó un dato que desconocía: Uno de los pilares de la formación de la típica del conguero fue el recién desaparecido pianista Héctor Rivera. Leer la Edición 31- 2005 de Melómanos Documentos.
Uso este espacio para recordar entre sus grabaciones: Encendido otra vez, Tumbao Moderno, dame tu cariño, Mucumbembé, Más Pachanga, Guaguancó Pueblo Nuevo, Celosa, Noche de Ronda, Mr. Blah Blah, El Bantú; Te traigo Guajira y Danzón Paganini.

Siguió el Latin Jam- Latino en 1962. En la plantilla de ese trabajo participaron el cubano José Chombo Silva- saxo tenor y el ilustre trompeta cubano Alex El Negro Vivar.
Ese mismo año (1962) los salones de baile de NY fueron ventilados por el swing del álbum Charanga Moderna que incluyó la composición El Watusi que le marcó el compás a los bailadores. También fue record en popularidad y ventas. A este hit le pisó los talones (pies) la grabación The Soul Drummers.
Los registros musicales anteriores sitúan a Barretto entre uno de los estandartes de la línea del Latin Soul y los sonidos Funkys. Elementos que de alguna manera explican que el concepto musical que se refleja en sonido de sus agrupaciones fueran diferente a las demás. Al fin de cuentas admitía ser un melodista enamorado de las buenas armonías y se esforzó por demostrar que la percusión tiene basamentos melódicos.
Después, entre 1963 y 1967 visitó los estudios para preparar 8 LPs más, antes de firmar con Fania Records. Para la reflexión de propios y extraños queda el hecho que varias de estas grabaciones recibieron la acogida sólo con el paso del tiempo. Afirmación que confirman los premios que obtuvo.

1967 Firmó con Fania y distinciones
Aunque firmó con la Compañía Fania en 1967, paralelo atendía su orquesta en la que gozaba del talento del gran sonero boricua Adalberto Santiago que después en 1972, en compañía del pianista cubano Sonny Bravo, Johnny Rodríguez- conguero, Orestes Vilató- timbalero y Dave Pérez- bajista dejaron la banda de Ray para armar La Típica 73. A ese reto el Manos Duras respondió en 1973 con el LP- Fania- Indestructible que orgullosamente mostró en nómina al pianista colombiano (Pasto- Nariño) Eddie Martí nez que se encargó de los arreglos en compañía de Louie Ramírez y Louie Cruz. La voz fue la del panameño Tito Allen.
La plantilla de la remosada banda la complementaban:
Barretto - Productor, director y congas
Roberto Rodríguez - Trompeta
Manuel Durán - Trompeta y flugelhorn
Joseph Papi Román - Trompeta
Art Webb - Flauta
Tony Fuentes - Bongóes
Ray Romero - Timbales
Julio Romero - Bajo
Eddie Martínez - Piano
Tito Allen - Vocalista
Jerry Masucci- Productor Ejecutivo

El primer trabajo discográfico bajo la licencia de la compañía de Pacheco y Masucci (1967-1968) fue Acid- producido por Jerry y Harvey Averne. En la contratapa del LP, el vocalista y rayador de güiro Pete Bonet escribió en uno de los apartes finales de la presentación de la grabación:
"Otra vez vuelves a ser el mismo, vuelves a ser el Ray Barretto de hace seis años atrás".
Al éxito de Acid siguió el LP- Fania- Hard Hands- Manos Duras. Rompiendo los cueros con el alma: Una Obra Maestra: Hard Hands, Abidjan, Love beads, Mi Ritmo te llama, Got to have you, Son con cuero, Mírame de frente, NY Soul y Ahora si. A muchos les cuesta entender que otra vez figuró el vocalista Adalberto Santiago en la plantilla, después de lo que sucedió con La Típica 73. ¡Adivínalo César!.
En lo personal: ¡Abran paso caballeros!... el LP- ¡Que Viva la Música! que incluyó Cocinando y Alafia Cumayé- quemando la liga (bravo) como decía Marvin Santiago.
En 1976 con el LP- Fania- que incluyó la composición Guararé fue nominado a un Grammy. En varias ocasiones, entre 1975 y 1985, la Revista Latin NY lo condecoró con el título de Mejor Conguero.
1979 sirvió para romper los termómetros con el LP- Rican Struction. Para la crítica un fuera de serie. Los arreglos fluyeron de las manos del teclista Óscar Hernández y las gargantas de: Tito Allen, Adalberto Santiago y Ray de La Paz.

En 1989 se hizo acreedor a un Grammy por el trabajo Ritmo en el Corazón en el que compartió honores con La Guarachera Universal, la habanera Celia Cruz. Con ella repitió honores, junto a Adalberto en el vinilo Tremendo Trío- a criterio de la ACE- The Hispanic Association of Entertainment Critic of NY.
Fania frenó de alguna manera el impulso jazzístico de Barretto- con esa etiqueta sólo grabó 1 trabajo en esa línea: The Other Road. Hasta se comenta que le recomendaron grabar música comercial.
Atendiendo observaciones de mis amigos, prefiero decir que no me fue posible compilar una cuasi-discografía por lo deficiente y fragmentaria que se halla la in formación.

El pasado 14 de enero de 2006, fue honrado por la Asociación Internacional de Educación del Jazz- AIEJ con la distinción de Maestro del Jazz, siendo el segundo latino en recibir este galardón después del saxofonista, flautista, clarinetista, director y arreglista cubano Paquito D´Rivera. Justamente de regreso a su hogar en NY después de la ceremonia, le sobrevino el ataque de asma en medio de una intensa nevada.
El 2006 pintaba para Barretto muy prometedor ya que también fue postulado a los premios Grammy en la Categoría de Jazz Latino por su obra Time Was, time Is.
El Sueño se hizo realidad. Anfiteatro Tito Puente de PR, viernes 27 de abril de 2001. Doble CD- The Giant of Salsa- Live 50th Aniversary para la compañía Sony, marcó para Ray en su momento el adiós definitivo de las grabaciones. Desde 1992 se ocupó de su: Academia, giras y del sexteto New World Spirit, con él produjo una última grabación: Contact.

Quebrantos de salud
Ray falleció en la fría mañana del viernes 17 de febrero de 2006, en el Hospital Valley de la Universidad de Hackensack - NJ. Al centro asistencial ingresó por urgencias afectado por severos síntomas asmáticos que configuraron un complicado cuadro de neumonía. En vista de su comprometedor estado, los facultativos prescribieron mantenerlo con respirador artificial para estabilizar su condición antes de intervenirlo el domingo 15 de enero de 2006.
Transcurridos unos días, el domingo 29 de enero, fue preciso llevarlo de nuevo al quirófano porque se quejó de dolor agudo en el pecho y en el exámen que le prac ticaron le detectaron sangrado interno en una de sus arterias coronarias, siendo necesario implantarle unos desvíos - bypass. Paralelo se le realizaron procedimientos de diálisis. Durante el tratamiento su médico familiar el Dr. Fidel Estrada permaneció atento a su evolución. ¡Gloria eterna para Ray!. Ahora descansa en la Isla del Encanto.